La mayonesa es una salsa fría reconocida mundialmente, compuesta básicamente por huevo y casi un 80% de aceite vegetal, acompañado por jugo de limón -o vinagre- y sal. Aporta muchas grasas y proteínas.
Su origen no tiene una datación exacta, pues son muchos quienes se han atribuido el descubrimiento de esta salsa tan exitosa. Una de las principales teorías cuenta que se descubrió en el siglo XVIII, cuando la Isla de Menosca fue invadida en el año 176, y en la celebración de la victoria les sirvieron una salsa muy similar a la actual mayonesa.
La mayonesa tiene mucho éxito en las comidas y no hay mucha gente a la que no le guste, aunque su inconveniente es su alto contenido calórico, especialmente las que se compran hechas industrialmente. Por eso, es más aconsejable usar mayonesa casera, por lo que te traigo el día de hoy varias recetas de salsa mayonesa para que hagas la que más gustes, así comerás más saludable, sorprenderás a los comensales y tus comidas tendrán un toque más gourmet.
Y si bien, como ya comenté, sus bases son yema de huevo, aceite, jugo de limón -o vinagre- y sal, se pueden hacer muchas variaciones en su preparación como, por ejemplo, usarse cualquier tipo de aceite, ya sea de girasol, de maíz, híbrido de varias semilla y hasta de oliva en cualquier graduación. Incluso puedes mezclar varios aceites para darle tu propio sabor.
También, usar los huevos enteros o sólo la yema va a tu preferencia. Algunos te dirán que es mejor sólo la yema, otros que es fácil hacer la mayonesa con los huevos enteros... ¡así que prueba sin culpa! Y si te queda muy espesa para tu gusto, puedes aligerarla con agua, leche u otros líquidos.
Puedes optar por usar una batidora eléctrica o batir a mano. En todos caso, lo único que debe preocuparte es que los ingredientes siempre estén a temperatura ambiente o es posible que se te corte y no cuaje.
Ten en cuenta las precauciones de higiene al elaborar un aderezo que no se cuece como este:
- Procura que no caiga ni un trocito de cáscara en la mezcla.
- Desechar los huevos sucios por fuera.
- Elaborarla sólo para usarla inmediatamente.
- En caso de conservarla, hacerlo en un recipiente de vidrio bien cubierto y en la heladera, no por más de 3-4 días.
- La AESAN recomienda que se añada ácidos a la mayonesa, como el limón o el vinagre.
- Usar utensilios limpios y maniobrar adecuadamente.
Ahora que ya tienes la información adecuada para hacer una salsa mayonesa sin peligro para la salud, te dejo estas sencillas y fabulosas recetas:
¡Con estas tres recetas básicas, no dudes en explorar el mundo culinario haciendo tus propias variantes! Y si te ha gustado, ¡recuerda comentar y compartir!
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